En este momento estás viendo QUÉ SON, CÓMO PREVENIR Y TRATAR LAS AGUJETAS

QUÉ SON, CÓMO PREVENIR Y TRATAR LAS AGUJETAS

Tiempo de Lectura: 3 minutos

Dra. María Cánovas. Divulgadora científica de rendimiento deportivo, profesora en la UCAM y colaboradora de Fitmylegs.

Existe una cantidad de mitos sobre la práctica de la actividad física que, en su mayoría, son falsos. El desconocimiento y la gran cantidad de información que recibimos a través de los medios de comunicación y del boca a boca pueden llevarnos a unas creencias totalmente erróneas sobre la actividad física.

El mito de las agujetas

Antiguamente, se creía que las agujetas eran microroturas producidas por cristales de ácido láctico que se acumulaba en el músculo cuando se realizaba un ejercicio de alta intensidad. Aunque las agujetas sí son microroturas musculares (de ahí el dolor), el error partía de relacionar la formación de ácido láctico con una mala metabolización de la glucosa. Por esta razón, el remedio por excelencia y que seguro habéis escuchado o incluso usado es beber agua con azúcar o con bicarbonato creyendo que, con esto, los cristales desaparecían o que incluso no llegarían a formase, cosa que es totalmente FALSA.

Entonces, ¿qué son las agujetas?

Las agujetas, más conocidas en el mundo científico como DOMS*, son un dolor muscular que aparece después de realizar ejercicio intenso o prolongado tras un periodo sin realizar ejercicio, o cuando realizamos un entrenamiento con una intensidad más elevada de lo habitual (Drobnic, 1989).

Y aunque seguramente las hayáis experimentado alguna vez en vuestras propias carnes, tranquilas, no hay de qué preocuparse. Las agujetas no tienen mayor complicación que la dificultad de mover la propia articulación. Estas complicaciones suelen aparecer 24-48 horas después de realizar el ejercicio y pueden durar hasta siete días dependiendo de la intensidad y la complejidad de los mismos.

Es posible que sientas la musculatura tensa, contracturada y sientas dolor al realizar diferentes movimientos o al palpar la zona. Aunque parezca mentira, de las agujetas no se libra nadie, ni los deportistas más experimentados, pero serán más intensas para personas poco entrenadas. Las agujetas son una lesión benigna que se cura sola, sin necesidad de ningún tipo de tratamiento y aunque no las podamos evitar, sí las podemos prevenir.

¿Cómo puedo prevenir las agujetas?
Cuando decidimos comenzar a realizar ejercicio físico debemos realizarlo con una correcta progresión y sin buscar resultados a corto plazo. Por eso, la mejor prevención de las agujetas es que realices un ajuste correcto de las cargas de entrenamiento a tus posibilidades, evitando grandes cambios en la intensidad y tipos de ejercicio.

¿Qué puedo hacer si ya tengo agujetas?

Para las agujetas no existe ningún tratamiento efectivo que las haga desaparecer. Si después de realizar tu entrenamiento, aparecen las agujetas, una buena opción sería realizar el siguiente entrenamiento con una menor intensidad. Ten paciencia, el músculo logrará adaptarse poco a poco al ejercicio y disminuirá el dolor, y así podrás realizar con el tiempo actividades con mayor intensidad y más complejas.

Es importante destacar que hay tratamientos que resultan inútiles para disminuir la microlesión que acompañan a las agujetas o para acelerar su recuperación como: la terapia láser, ultrasonidos, la aplicación de frío inmediatamente después del ejercicio, los analgésicos, la acupuntura o el masaje (López-Miñarro, 2002). La práctica del estiramiento, antes y después de cada entrenamiento, no parece tener gran importancia, aunque sí que es útil para mejorar la adaptación del musculo y para una recuperación más rápida.

“Y si no tengo agujetas significa que no he entrenado bien…”.

Te equivocas. La aparición de las agujetas no significa que estés realizando un correcto entrenamiento. No es necesario que aparezcan las agujetas para que exista adaptación en nuestro cuerpo. Si las cargas de entrenamiento están adaptadas a tus capacidades, y no aparecen las temibles agujetas, no te preocupes, lo estás haciendo genial.

* DOMS: delayed onset muscular soreness (dolor muscular postesfuerzo de aparición tardía).

Deja una respuesta

Esta entrada tiene 4 comentarios

  1. Charo

    Muy interesante, me encantan vuestros post!! Muchas gracias.

  2. Gemma

    ¡Me encantan vustros posts! En todos se aprende algo. Gracias por compartirlo!!

  3. Sharon

    A cual post mas interesante‼‼…es como querer ampliar info todo el rato😜

  4. Sonia Rodríguez Pérez

    ¡Muy interesante !